‘Tears in Heaven’, una de las canciones más emblemáticas del cantautor británico Eric Clapton, tiene una trágica historia detrás que quizás no conocías.
Corría la década de los 80. El primer matrimonio del músico, con la modelo Pattie Boyd, estuvo envuelto en problemas, por las constantes infidelidades del inglés. Producto de uno de sus tantos affairs, nació la primera hija del artista: Ruth.
Boyd y Eric Clapton intentaron tener un hijo, incluso recurrieron a la fertilización in vitro, pero los perdieron.
Ya en los estertores de su matrimonio con Pattie, el exguitarrista de Cream conoció a la modelo italiana Lory Del Santo, con quien inició una relación.
Ambos se conocieron durante una cena en Milán. Y, pese a que la también fotógrafa no quería salir con alguien famoso que solo quisiera pasar una noche con ella, el rockero conquistó su corazón.
UNA RELACIÓN CON ALTIBAJOS
La relación fue muy difícil para ambos. Eric Clapton estaba en pleno proceso de divorcio y se recuperaba de su adicción a las drogas. Aunque Lory Del Santo recordó en esa entrevista que no lo vio drogarse delante de ella, sí pudo darse cuenta que el genio detrás de ‘Tears in Heaven’ era alcohólico debido a problemas mentales y emocionales.
El músico incluso pasaba días en los que no quería ningún ruido en casa y hablaba muy poco con su entonces pareja. Luego volvía todo a la normalidad. Fue en uno de estos últimos periodos que ambos hablaron de tener un niño. Una de las razones del divorcio de Pattie Boyd fue que no lograron tener descendencia. Eric Clapton, según Lory Del Santo, aceptó tener un hijo.
Durante una cena en Londres, la modelo italiana se sintió muy mal. Pensaron que había sido la comida londinense, pero la verdad era otra: ella estaba embarazada.
Cuando se lo comunicó al músico, este reaccionó pésimo. Según Del Santo, Clapton odiaba los cambios y prefería una vida simple y organizada. Tener un bebé afectaba eso.
Los meses siguientes fueron duros. Eric se alejó de Lory y apenas si se comunicaba. Incluso, su mánager le pidió que abortara, pero ella continuó adelante con su decisión de traer al mundo a su pequeño.
Cuando la modelo decidió dar a luz en Londres, Eric Clapton se opuso en un principio. Luego aceptó hacerse cargo de su hijo, al que bautizaron como Conor. Los tres comenzaron a vivir como una familia y todo parecía felicidad.
Lamentablemente, el caracter del músico volvió a relucir y este no entendió que las necesidades de un niño son primero que todo. Cuando Conor tenía 3 años, se separaron. La modelo decidió que Clapton viera cuando quisiera a su pequeño.
TRÁGICO FINAL
En marzo de 1991, Lory Del Santo y Conor viajaron a Nueva York para pasar Pascuas con el artista inglés. El 19, Clapton paseó todo el día con su hijo y expareja. Lo llevaron al circo en Long Island, Nueva York, y los tres pasaron “el día más feliz de sus vidas”, según recuerda la modelo en la misma entrevista. Eric Clapton le dijo que había decidido hacerse cargo de su hijo porque “ahora entendía lo que significaba tener un niño”.
20 de marzo de 1991. Conor se levantó muy contento por el día que había pasado junto a su “papito”. Eric los iba a llevar al zoológico por la mañana. Aún estaba en pijamas jugando con su nana. Su madre había terminado de bañarse y estaba preparándose para la salida. Le pidió que se apurara.
En la misma fecha, el conserje del edificio en que se alojaba temporalmente en la ciudad estadounidense hacía trabajos de limpieza en el departamento. Lory ordenó a la nana y la sirvienta que no dejen al niño solo ni por un segundo. Cuando Lory salía del baño, escuchó su fax sonar. Se detuvo a ver el mensaje.
De un momento otro, oyó que Conor salía de su cuarto a toda velocidad para jugar a las escondidas. El pequeño se metió al cuarto donde el conserje estaba limpiando un gran ventanal, la nana estaba detrás de él, pero el sujeto la detuvo diciéndole que era peligroso.
En ese momento, Conor corrió a través del ventanal abierto del departamento, ubicado en el piso 53 de un rascacielos neoyorquino y cayó. Murió instántaneamente al tocar el techo del edificio continuo. A los 5 minutos, Eric Clapton llegó al departamento, sin saber que su segundo hijo había fallecido de forma tan trágica.
FUE SU INSPIRACIÓN
Dicen que perder a un hijo es lo más doloroso que puede pasar un ser humano ya que va contra la lógica de la vida misma: son los hijos quienes entierran a los padres.
Eric Clapton se aisló por un periodo pero luego encaró el dolor y la pérdida de Conor como mejor podía hacerlo: componiendo.
‘Tears in Heaven’ fue escrita por el artista y Will Jennings para la banda sonora de la película ‘Rush’ de 1991. En una entrevista con Sue Lawley en 1992, Clapton dijo lo siguiente sobre esta canción:
“Hay una canción que he escrito para una película, aunque en realidad estaba en mi cabeza pero no tenía una verdadera razón para existir hasta que estuve compusiendo para esta cinta y entonces como que tenía una razón a ser. Y es un poco ambigua, ya que podría ser tomada como [una canción] sobre Conor pero también que estaba destinada a ser parte de la película”
Fuente
Foto: Duna.cl